A unos trescientos metros del Crucero, por la vía al Rosario, se encuentra la vivienda de Ana Bolena y Álvaro, quienes iniciando el mes de febrero de este año vieron en riesgo de derrumbe su casa a causa de las fuertes lluvias. Esta casa está situada sobre un barranco al lado de la carretera, por lo que las aguas lluvias han ido generando un desgaste en el mismo hasta derrumbarlo y dejar en riesgo la humilde vivienda. Afortunadamente, algo que se pudo convertir en una tragedia ha demostrado la solidaridad y la buena voluntad de nuestros vecinos: la comunidad ha colaborado donando bloques, tablas, alambre para construir un muro de contención. Las ferreterías también han recibido y aportado donaciones, se vendió lechona para recaudar fondos, el maestro José, Aldemar, Julián y José Vicente han aportado su trabajo los domingos para lograr la meta de terminar el muro. Es un trabajo que gracias a la comunidad sensible y colaboradora va viendo sus frutos. En cuanto se logre la meta, todas las cuentas de las donaciones serán hechas publicas por medio de las redes de la Buitrera. ¡Muchas gracias a todos los que han sido participes de esta buena obra!
Este acontecimiento, sin embargo, nos deja también un par de reflexiones y precauciones que debemos tener para evitar estas situaciones en el futuro puesto que, unos pocos metros después, estas aguas lluvias son canalizadas por debajo de la vía por un tubo de desagüe, y luego transitan por una acequia que pasa muy cerca a otras viviendas que, con el tiempo y la erosión, también estarán en riesgo. Esperamos no tener cosas que lamentar más adelante, ya que además de los riesgos causados por la erosión que afectan las viviendas del sector, se le suma la de los sancudos transmisores de enfermedades por las aguas estancadas. Es hora de realizar medidas preventivas para que no lleguemos a tal punto.
Nota Guatín:
Al parecer, no contamos en La Buitrera con un ente responsable ni para obras ni para mantenimiento de desagues de agua lluvia, lo que nos obliga a actuar en forma individual o comunitaria. En situaciones de riesgo, la solidaridad veredal es nuestro principal activo. Felicitaciones a los vecinos de Pueblo Nuevo.
¿Y después? Queda pendiente (¿en nuestra futura “localidad”?) fijar las “reglas de juego” del uso del suelo y las responsabilidades de c/u, sin escapar de nuestra responsabilidad individual cuando construimos en zona de riesgo. Requiere de un buen debate, y reglas consensuadas y socializadas.